jueves, 23 de abril de 2015

ADAPTACIÓN DEL CUENTO ROSALINDA Y LOS SIETE BANDOLEROS 2

María y los siete ladrones




Erase que se era en una aldea lejana, situada en el norte de España, un rey que tenía una hija a la que quería mucho, la niña se llamaba María y le encantaba leer de todo.

La madre de la niña había fallecido, y el rey decidió casarse de nuevo para que así la niña no estuviese sola ya que el rey trabajaba mucho, decidió casarse con Martina. La mujer nunca quiso a la niña ya que tenía envidia porque el rey la quería más a ella.

Cuando la niña creció era una joven muy guapa, Martina no podía soportar que la joven fuese más guapa que ella; decidió mandar a un soldado para que la abandonase en el bosque y la tirase a un rio.

El soldado la quería mucho, como todos los demás y cuando la llevó al bosque le explicó que debía hacer para sobrevivir y le dijo que no volviese a palacio ya que la Martina la quería matar.

María se metió en una cueva, y allí comenzó a vivir: como había estudiado sabía que plantas eran las que se podían comer y así fue viviendo, se inventó un aparato con hojas y ramas de manera que cuando llovía todo el agua se quedaba retenida y de esta forma ella siempre podía beber agua; también cogía las plantas y se las guardaba por si alguna vez aparecía un animal y no podía salir de su cueva para comer.

Aunque ella podía sobrevivir, estaba muy triste porque echaba de menos hablar con todos sus amigos y también echaba de menos leer aquellos libros que tanto le gustaban.

Llegó el invierno y empezó a hacer mucho frío, entonces decidió que debía cambiarse de cueva, a una en la que diese más el sol y por lo tanto hiciese un poco más de calor.

Estuvo varios días buscando una cueva pero ninguna era lo suficientemente caliente, y si era caliente estaba muy lejos de las plantas y frutos que se podían comer.

Cuando llevaba ya 6 días andando, encontró la cueva perfecta, estaba en lo alto de una montaña, había frutos  cerca y había un lago donde podía coger agua;  al entrar notó calidez y entonces supo que esa sería la cueva definitiva.

Al ir a investigar para conocer más la cueva encontró un pasadizo y al pasar por él vio que al final había luz, María que era curiosa se acercó y entonces vio fuego y a un muchacho que estaba asando un ciervo. Ella se sorprendió mucho ya que hacía meses que no veía a nadie y además después de tan largo viaje tenía mucha hambre.

El hombre al verla se asustó y le apuntó con una escopeta. María le dijo: --Lo siento, no quería asustarte, yo no quiero hacerte daño-. El joven le preguntó que quien era y ella que era muy lista y no se fiaba de él le dijo: -Es que me he dado un golpe en la cabeza y no me acuerdo de nada, pero tengo mucha hambre-.  El joven sintió mucha pena y le dejó comer con él mientras esperaba a sus hermanos, mientras comían el muchacho le explicó que él tenía 6 hermanos y que eran ladrones, y se refugiaban en esa cueva.

Cuando se hizo de noche llegaron sus seis hermanos, al verla todos se asombraron mucho pero el muchacho les explicó lo que pasaba, se apartaron de María para hablar y cuando acabaron se acercaron a la joven y le dijeron que tenía dos opciones: la primera era que se uniese a ellos y la segunda era volver por donde había venido y que se fuese lejos. Ella que no quería estar sola  les dijo que se unía a ellos pero antes de salir a robar quería saber cuál era la razón por la cual robaban.

Los ladrones le explicaron que el gobernador que había elegido el rey para gobernar esa zona era muy avaricioso y robaba a toda la aldea, el padre de los muchachos se negó y entonces quemaron sus casa y se quedaron todos en la calle. Fue entonces cuando decidieron que harían justicia y robarían a los ricos para dárselo a los pobres y para poder vivir.

María sabía que su padre no permitiría algo así pero no se atrevía a decirles quien era y les preguntó que si se lo habían dicho al rey, ellos se rieron de ella y le dijeron que el rey quería llevarlos a la cárcel y que nunca creería antes a unos ladrones que a un gobernador, ella se quedó pensando y finalmente les dijo:-Es verdad, tenéis razón-.

Al principio no se atrevía a salir a robar con ellos y entonces se quedaba en casa y con lo que sabía de los libros se dedicaba a cocinar, buscar hierbas para curarles si se hacían daño…

Poco a poco tenía más confianza con ellos y empezó a salir con ellos a robar. El más pequeño de los hermanos que se llamaba Juan empezó a sentir algo por la joven y ella también por él, finalmente los dos se enamoraron uno por el otro.

Un día que salieron todos los hermanos a robar, tardaban mucho en llegar y María estaba muy preocupada. Al final aparecieron tres de los siete hermanos, y venían con muchas heridas, María les preguntó que qué había pasado y los demás le dijeron que habían atrapado a sus hermanos, entre los cuales estaba Juan y que les llevarían para siempre a la cárcel.

Ella decidió que irían a palacio y que rescatarían a los demás. Ella quería ir a ver al rey pero los demás tenían miedo, aunque accedieron a ir con ella.

Cuando llegaron a palacio habló con un soldado: ¡Necesito hablar con el rey! Decidle que su hija María le necesita. El rey se negó ya que pensaba que su hija había muerto, el soldado le dijo que la joven insistía y finalmente acepto ver a esa joven misteriosa.

María se acercó al rey y le dijo que era su hija pero él no la creía, seguía creyendo que su hija estaba muerta.

Para que su padre la reconociese le empezó a contar cosas de la infancia que solo sabían su padre y ella. El rey por fin la reconoció y empezó a llorar de alegría pero no entendía que había pasado, entonces María le explicó todo lo que le había hecho la madrastra y todo lo que habían hecho por ella los ladrones.

El rey desterró a la madrastra pero no entendía cómo era posible que unos ladrones la hubiesen ayudado y entonces ella le explicó toda la historia de los ladrones: el gobernador, Juan, que les habían apresado etc.

El rey decidió soltar a los ladrones pero con una condición: ellos debían convertirse en su guardia personal. Los ladrones aceptaron sin dudarlo ni un momento.


María tenía otra petición: que les diese su bendición a él y a Juan para poder casarse. El rey aceptó encantado y entonces los dos se casaron y fueron felices para siempre; y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Adaptaciones 
He hecho las adaptaciones para niños de 4/5 años porque me parece una historia adecuada para la edad de éstos. Las adaptaciones que he pensado correctas para la edad seleccionada son las siguientes:

Adaptaciones en los personajes:
  • Rosalinda = María. he cambiado el nombre para que les sea más conocido.
  • El hermano pequeño = Juan 
  • Los siete bandoleros = los siete ladrones. He cambiado este término porque sinceramente no creo que los niños conozcan el significado de bandoleros, ya que ni yo misma sabía lo que era.
Otras adaptaciones que he hecho han sido:

  • No lo he situado en una montaña sino en una aldea al norte de España, porque en una clase es muy difícil que todos los niños conozcan una montaña que sea real, sino viven allí.
  • He quitado varias muertes: la de los padres de los bandoleros la he suprimido y la de la madrastra la he cambiado por el destierro ya que si no me parecía que había demasiadas muertes.
  • La protagonista no es una simple princesa sino que ella aún viviendo en el palacio se interesa y lee muchos libros y por esta razón cuando está en el bosque puede sobrevivir ella sola.

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